He sentido la frÃa brisa recorrer mi cuerpo,
de sensaciones que provocan profundos vacÃos,
se están apagando las brasas en la hoguera,
restando importancia a mi compañÃa,
se van apagando las luces de mi alma,
dejando en penumbras mi esperanza,
se han hecho ausente tus risas,
y no es por tu lejanÃa,
se están convirtiendo en melancolÃa,
los momentos maravillosos que tenÃa,
te he buscado, de mañana, tarde, noche y madrugada,
he insistido tanto y no has vuelto la mirada,
¡que tristeza la mia!