Tan predecible

Era lógico esperar tal reacción,
teniendo los diás contados
de agonía al corazón.
Con una nueva herida,
con una nueva experiencia,
con una nueva historia por contar.
Momento que hace crecer
la madurez
del romanticismo frugal.
Sin reproches o pésames.
Conociá también la verdad,
reconozco una buena actitud.
Asumo la verdad
tras el suicidio
de la fantasía.
Tu recuerdo lo estoy ahogando,
en las lagrimas que demuestran
la gravedad del asunto.
Supe que en esa noche
de sabado
quedaria todo en un adios.
cristopher antonio moraga
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13/07/10