-_-Cuidado que viene un Hunday-_-

¡Cuidado que viene un Hunday
con un conductor novato!.
Sonando va su aparato...
¡Chúnta chúnta, chúnta chúnta!.
...Sus cuatro pelos de punta,
el móvil siempre en la oreja
ahora en Bilbao o en Cibeles
o a tope por Astilleros
con otros tres compañeros.
Si el disco pone que atreinta...
él viene a ciento cuarenta,
que tiene cien y un caballos
a sus pies, y son vasallos
a los que trata a su antojo...
...sobre todo si hay un ojo
de una niña que los mira...
Y hasta parece mentira
que un joven piense hoy en día
que una mujer de valía
pueda sentirse atraída
por la ida y la venida
de tanto coche sonoro,
con tanta fuerza en el "loro",
tanto móvil en la oreja...
y nada entre ceja y ceja...
y me asombra la incultura
que en este siglo aun perdura,
y que genera el dinero
sustituto lastimero
del que no tiene en el seso
ni el instinto de un sabueso.
y lo repito ¡Caray!
¡Cuidado que viene un Hunday!.