Versos sueltos para un Poema a Cristo.

1
Yo no quiero a mis Versos
Ponerle un Prólogo
Que os invite a leerlos
Y os suene a Elogio.
Sólo quiero tan solo,
Que quien los lea,
Tome a Dios tan en serio,
Como yo me lo tomo
Y crea en su existencia
Como yo creo.
Sólo quiero tan solo,
Que quién los lea
Le quiera a Dios un poco.
Y aunque sólo sea en eso,
Se me parezca.
Y si eso logro,
Me daré por feliz,
Con ser tan poco. 2
Estos Versos míos
Quieren ser lo que son:
Los Suspiros de un Alma Enamorada
Que va buscando a Dios.
Y que no va a cesar
De buscarlo.y buscarlo.,
Y no va a descansar
Hasta encontrarlo.
Cuando lo encuentre,
Ese será su Encuentro
Más deseado.
Y más alegre. 3
Os juro que si hay algo
Que yo deseo
Es ir sembrando Amores
Con estos Versos
Es ir llevando a Dios a tantos Hombres
Que, para su desgracia,
No le conocen.
Es irles invitando
A que como yo gocen
Del verdadero Amor de los Amores,
Que sólo en Cristo está representado. 4
Os juro que mis Versos
Hablan siempre de Amor
Y sólo Amor encontraréis en ellos.
También, por ello, encontraréis a Dios,
Que sólo por Amor
A semejanza Suya nos creó. 5
Podéis creerme:
En mis Versos no busco
Ni Honores ni Riquezas,
Ni Fama ni Dinero:
La Gloria de Dios busco solamente.
Quiero ser en Sus Manos
Un dócil instrumento
Que Su Gloria proclame
Y la proclame a los cuatro vientos. 6
Olvidaos de mi.
Pero leed mis Versos:
Todo mi Amor a Cristo
Lo he puesto en ellos.
Leedlos. Leedlos.
Y así Dios será mío.
Y así Dios será vuestro. 7
Me brotan, me brotan Versos,
Pues mi Corazón rebosa
Sentimientos.
Sin sentimientos, no brotan:
Mudo y sin habla me quedo.
Y, pues, rezo, haciendo Versos,
Si sin sentimientos quedo,
Me quedo, también, sin rezos
Y sin Dios mismo me quedo. 8
Yo sólo por Amor hago mis Versos.
Quiero, al hacerlos, parecerme a Dios,
Que todo por Amor también lo ha hecho. 9
Suspiros del Alma
Son los Versos míos.
Mis Penas y Gozos
Y mi Fe y mis Dudas
Se vuelven Suspiros.
Se vuelven Suspiros
Siempre a Dios buscando
Al fondo del fondo
Donde está escondido.
No le ven mis ojos
Ni le oye mi oído.
Pero yo le he visto,
Pero yo le he oído,
Cerrando mis ojos,
Soñando dormido.
¡Dios Mío, Dios Mío:
Ven los Sentimientos
Más que los Sentidos! 10
Cuando su Amor nos cuenta,
El Poeta no miente.
No hace sino decirnos
Lo que siente.
Cuando de Dios os hable,
Como Poeta o como Creyente,
Sólo una cosa os pido:
¡Por Dios, creedme!
Creedme lo que os digo,
Que el Poeta no miente.
Si el Poeta mintiera
Se engañara a sí mismo
Y a Dios mismo ofendiera.
Y en el ser más indigno
Se convirtiera. 11
Cuando a Dios le miramos, Dios nos mira
Y a Dios mirando siempre están mis Versos,
Pues siempre a Dios mirando está mi Vida.
Lee, pues, estos Versos
Y que Dios te bendiga
Si a Otros también animas a leerlos.
Porque un bien nos harás
A ti, a mí y a ellos.
Y ese bien será el Premio
Que Dios nos pagará
Por el bien hecho. 12
Nunca os diré quien soy.
Nada importa mi Nombre.
Dios lo conoce.
Os diré lo que importa:
Soy un pobre Poeta
Que a Dios le honra
Y quiere que, con él, todos le honren.
Mis demás datos personales, sobran. 13
En mi, Señor, se dan,
Humildad y Soberbia.
Soberbia y Humildad
Soberbia, cuando pienso,
Que Dios habla por mí
Cuando escribo mis Versos.
Humildad, cuando pienso,
Que Dios de mi se sirve
Cuando estoy escribiéndolos.
En cualquier caso,
Si Dios no habla por mí,
Yo, de Dios, sí que os hablo,
Y os hablo, porque quiero
Esto tan sólo:
Que como yo le quiero,
Le queráis todos. 14
¡Oh!, Divina Hermosura:
No dejes que estos Versos,
Hechos sólo de Amor y Sentimiento,
Acaben en un cubo de basura,
Camino de cualquier estercolero.
Sabes que al escribirlos, sólo quiero
Encender en las Almas que los lean
Este Fuego de Amor en que me quemas.
Este fuego de Amor en que me quemo.
Porque el Amor y el Fuego,
Cuando de Amor no incendian a otras Almas,
No merecen que Amor;
No merecen que Fuego les llamemos. 15
De mi paso por la tierra
Mis Hijas heredarán
Dinero, Casas y Tierras.
Todo lo que fui ganando,
Trabajando y trabajando
Al límite de mis fuerzas.
Pero a todos quiero haceros
Herederos de otros Bienes
Que aquí os dejo,
Y a los que no pongo precio
De tanto valor que tienen:
Y esos Bienes, son mis Versos.
Todo yo,
Todo yo estoy en ellos.
Y, por eso,
Valdrán lo que valga yo.
Valdré, lo que valgan ellos.
Míos son.
Míos son. Y ya son vuestros.
Pensad esto.
Pensad esto:
Cuando mis Versos os doy
Todo entero a mí me doy.
Y si me doy todo entero
Daros aún más,
Ya no puedo.
No podréis pedirme más,
Pues ya nada mío tengo
Que no os haya dado ya.
Os lo dije y os lo digo:
Lo que importa
No es enriquecer bolsillos.
Sí enriquecer Corazones.
Y eso, tan sólo se logra
Leyendo Versos de Amores
Como los que yo os he escrito
Y aquí os dejo
Por Herencia.
Bendito. Bendito sea
Quién los lea.
Quién a Otros dé a leerlos 16
Para llegarme al Alma
Dios se me hace Palabra
Y a mí Palabra me hace.
¡Qué Alegría más grande!
Tenerle a Dios al habla
Y hacer que Poesía
Se vuelvan Sus Palabras
Y se vuelvan las mías. 17
Yo no escribo estos Versos
Para que me alabéis.
Sólo quiero con ellos
Que Gloria a Dios le deis.
Quisiera que mis Versos
El Corazón de quien los lea enciendan
Y lo llenen de Luz y de Esperanza:
Que el Centro de la Vida, no es la Tierra.
El Centro de la Vida es nuestra Alma.
Quisiera que mis Versos
Ascua Encendida fueran
Y que abrasaran en su ardiente Fuego
A quienes los leyeran.
Aunque mi torpe mano los escriba
Y sean sólo hileras de palabras,
Sólo mi Amor a Dios me los inspira
Y busco en quien me alabe, Su Alabanza. 18
Poeta es aquel que eleva
Sus Sentimientos al límite,
Para así hacernos sentir
Cuanto siente, cuanto dice.
Poeta es el que más alto
Nos eleva cuando escribe,
Porque su Pasión le impulsa
Más allá de todo límite.
Poeta es aquel que huye
De lo feo y lo vulgar
En busca de lo Sublime.
Y que Sublimes nos hace,
Si lo que busca, consigue.
Poeta es aquel que sueña
Y que nos hace creer
Que es creíble lo Increíble.
Y lo Increíble, Dios es,
Pues sin verle nos exige
Creer en El
Y no dudar de que existe. 19
Amados Versos míos:
No sólo os escribí;
Por mi vivís y moriréis conmigo.
¿Quién a leeros va
Cuando yo me haya ido?
Por eso, antes de irme,
No me harto de leeros.
Hasta que yo me muera,
¡Vivid, al menos!
Amados Versos míos:
Cuando me muera, dentro de mi Alma,
Os llevaré conmigo.
Amados Versos míos:
Huyamos de esta Tierra.
Me voy. Venid conmigo,
Porque Dios, en El Cielo,
Ya nos espera. 20
Me he desnudado en mis Versos.
Cómo soy por fuera has visto.
También cómo soy por dentro.
Te haré nuevas Confidencias:
Aún más que que me hayas visto,
Me importa que me comprendas
Y aprendas a amarle a Cristo.
Te he dicho mucho de Cristo.
Mas, por mucho que te diga,
Es más lo que no te he dicho.
Necesitara mil Vidas:
¡Mil Vidas para decírtelo! 21
Mis Versos son mi Oración.
Mientras los escribo, rezo.
Después de haberlos escrito,
Sigo rezando, al leerlos.
Haciendo Versos de Amor
Mi Amor te canto, Señor:
Mi Oración está en mis Versos.
Está en mis Versos, Señor.
Quiero morirme escribiéndolos. 22
¡Qué pena, qué pena,
Poesía mía
Que nadie te sienta,
Que nadie te lea!
Pasaste de moda
Poesía mía
Y la Moda impera.
Eres esa prenda
Que ya está muy vista,
Que ya nadie lleva.
La tira o la rompe.
La rompe o la tira.
Mas no se la pone.
El Amor y Dios
Son temas caducos,
Pasados de fecha.
De Dios ya negamos
Hasta Su Existencia.
Y en su consecuencia,
Todo, todo gira
En torno a nosotros,
Porque no hay más Vida
Que esta vida nuestra,
Mientras la vivimos,
¡Hasta que termina!
Y en su consecuencia,
Sólo cuenta el Gozo.
Sólo el Dolor cuenta.
Si somos nosotros
A quienes afecta.
No importan Los Otros.
Los Otros no cuentan.
Pasamos de todo.
Para disfrutarla
Está hecha la Vida.
Si no la gozamos,
¿Para qué vivirla?
Ya nada es verdad.
Ya nada es mentira.
No hay más realidad
Que lo que la Vida
Nos quita o nos da,
Mientras la vivimos.
¡Hasta que se va!
Y en su consecuencia,
Para prosperar,
Esta es la Consigna
Que habrás de observar:
Sírvete de todos
Pero a nadie sirvas,
Que el Mundo está loco,
Mas Locos no hay ya.
Los Quijotes todos
Ya en su tumba están.
Tú pasa de todo
Que según te vaya,
Así el Mundo irá.
Y cuando ido te hayas
Lo que sea del Mundo
Contigo no irá.
Vienes de la Nada
Y a la Nada irás.
Si se hunde el Mundo
¡Allá Los Demás!
El Mundo ya es suyo.
Tuyo nada es ya.
¡Qué pena. Qué pena
Lo que está pasando.
Lo que va a pasar.
¿Quién así, sin Alma,
Nos pudo dejar?