Eres la luz que brilla en mi camino, la sonrisa que ilumina mi día divino. Eres la mano que me sostiene fuerte, la voz que me calma y me da suerte. Eres la amiga que siempre está ahí, la que me escucha y me entiende sin preguntar por qué. Eres la que me hace reír sin parar, la que me hace sentir que puedo volar. Gracias por ser tú, mi amiga querida, mi compañera de vida, mi hermana de corazón y alma unida. Gracias por estar siempre ahí, en lo bueno y en lo malo, por ser mi roca, mi refugio, mi paz y mi calma. Eres el timón de mi barco, no te dejaré sola, mi guía en la tormenta, mi estrella que brilla sola. Juntas navegaremos, por mares y por cielos, y en cada momento, te llevaré en mis sentimientos. Te admiro y te quiero con todo mi ser, por ser la persona increíble que eres, sin temor a caer. Eres un tesoro, un regalo divino, un amiga verdadera, Con amor que siempre brilla.