Hay un misterio insondable
oculto en el más allá,
un mundo inimaginable,
un enigma impenetrable
para aquellos que habitamos
este mundo terrenal.
Hay cosas que no se explican
y preguntas sin respuesta,
hay dudas que manifiesta
nuestra intranquilidad.
Aquellos que ya han partido
de este mundo de los vivos,
que ya han traspuesto el umbral,
permanecen en silencio,
muy lejos de los sentidos
y son intentos perdidos
el quererlos contactar.
El misterio prevalece
en vida de los mortales,
mientras que, por dentro, crece
la estéril curiosidad;
las verdades y los hechos
no son para nuestra mente,
nos ocultan, sabiamente,
la posterior realidad.-