Siempre me pediste ayuda
porque no sabias en quien confiar;
pero nunca me consideraste
cuando tuviste ganas de amar.
Yo sigo aquí y aunque es en vano,
me encierro en mi mundo
y trato de olvidar la realidad.
Encadenada a este amor creo,
viviré por la eternidad;
pero debo encontrarle sentido a mi vida,
sabiendo a tu lado no estaré jamás.
No volveré a escuchar tus problemas,
es que ya no te puedo aconsejar.
Me alejo para que me olvides,
a este juego ya no lo quiero jugar.
No puedo finjir el papel de amiga,
sabes muy bien que siento algo más.
¿Como callarme si quiero gritar?
¡Date cuenta! ¿quien es la que te escucha?
¿quien es la unica capaz de soportar
ese caracter temperamental?
Si te doy una palabra de aliento,
para así tu bronca apaciguar;
no pienses que es por ser servicial,
es que solo me importas vos,
pero ya basta, todo tiene un final.