La recompensa de haber llorado
por las calles desoladas
zumbándome los oídos
mis hábitos de melancolía
pago inmerecido, me regalo la vida
ironías,de tenerlo todo al alcance mio
y haber amado a un mal nacido
que aún pasen mil años, no lo olvido
mi alma desprendida,suplicante y ciega
interrupiendo su diálogo
mi devario se ha desgastado
lo siento ya, tan envejecido
vagando el cielo gris
blanco como la espuma
mi ciudad lejana, aún más se entristece
de sentir, el temblor de mi voz en queja
contemplando desde lejos los prados floridos
detrás de los grandes ventanales
dónde te esperaba, contando la horas
fumando un cigarrillo a hurtadillas
porque me lo tenias prohibido
cuántas veces ,le pedi al cielo
reconozca mi sufrir, e incline su aliento
a mi boca suplicante,para decirle adiós
sin mirar un día atrás
la recompensa ,de haber llorado sin consuelo
sin lastimar con mis silencios
tú...tú sin reservas ,ni sospechas ya ,en mi ausencia
la vida te cobró,lo que me debias
llorando hasta hoy, y llevando una cruz
mi amor lejano, te lastima,a morir 4/oct/1994