Te esperaré,
el tiempo que sea necesario,
aún cuando los inviernos estèn fríos,
cuando no tenga nada que esperar ya.
Te esperaré,
hasta que el destino nos encuentre,
hasta que nos miremos a los ojos y
me digas que era yo a quién esperabas.
Te esperaré,
no importa que pasen miles pimaveras,
no importa que mi piel se marchite,
siempre con la esperanza de encontrarte.
Te esperaré,
hasta el final de los días,
hasta que la noche se vuelva día,
siempre con el anhelo de conocerte,
Te esperaré,
no importa que pasen miles pimaveras,
no importa que mi piel se marchite,
siempre con la esperanza de encontrarte.
Te esperaré,
hasta que el destino nos encuentre,
hasta que nos miremos a los ojos y
me digas que era yo a quién esperabas.