suspiras,gimes,
gimes,lloras
lloras y después sonríes;
te digo algo al oído
que suelta tu carcajada
-¿ves amiga?,no era nada,
todo tiene la importancia
que tú le decidas dar,
muy pronto lo olvidarás,
¿que de verdad lo querías?
verás que al final del día
ya no lo echarás de menos
¡pues anda que no hay tíos buenos!
y te los quieres perder
por seguir colgada de él.
Sobre el parque cae la niebla,
el banco se va mojando
las dos seguimos hablando;
otra vez suspiros,risas,
las risas pasan a llanto
se cruzan nuestras miradas y salen las carcajadas;
el valor de la amistad
está donde debe estar,
ahora mismo en este banco
donde una mujer llorando
busca el calor de una amiga
en lo bueno,en lo malo,en la vida.
MARGA M.R. (mar 68)