Sigues siendo...

Sigues siendo
el sol que me ilumina,
que ciega mis ojos
y no permite
que vea sombras
a mí alrededor.
Sigues siendo luz,
el faro que me guía
a tu encuentro,
a tu cercanía.
Vague por rumbos inciertos,
volví con rasguños
y algunas heridas,
con veinte años de conocimientos
que antes no tenia.
Sobreviví
y heme aquí viéndote
y amándote
como el primer día.
Sin sentir pena
por mi osadía.
Veo el camino recorrido,
los amores centellantes
que han pasado uno a uno
sin poder yo evitarlo.
Son luces fugaces.
Seguís siendo el sol de mi vida.
La estrella perenne que se
que no me olvida,
que esta a mi alcance
a pesar de su majestuosidad.
Dios:
Que agradecida estoy
por tu generosidad…
a pesar del tiempo,
la distancia y los daños
él sigue siendo la razón
de mi infinita
locura de amor.