INEVITABLEMENTE, TODOS ESTAMOS SOLOS

Todos estamos solos
como calles sin pasos
escondidos del miedo y del silencio
desesperados de esperar la llegada,
de otras soledades
que acompañen las nuestras.
Todos estamos solos
como voz sin palabras,
como mansos locos
ignorantes de su locura alucinada.
Solos, como un arco sin flecha
fatigados de tanta soledad
buscando inutilmente claridades
en un mundo de sombras
en un mundo de muertos
que aún viven.
Solos, como una cárcel sin presos
atrapados en la estrecha camisa
de nuestro pobre cuerpo,
esperando la magia o el milagro
que nos aisle del mundo entero,
para entender que somos almas solas
donde habita total el universo.