¿Y mañana que tendré... ?
Es incógnita escondida
en el espíritu incierto.
Es una ignota noticia
por la que habré de esperar,
y con intranquilidad,
aguardo yo ese momento,
por saber si ella traerá
la calma o la tempestad.
Si fuera la dulce calma
la que con ella viniera...
Por fin habría reposo y ahondaría
mucho más, en su interior tan hermoso.
Hablaría de mil cosas,
de cosas muy diferentes,
y juntos al fin tendríamos
mas tiempo para vivir,
los muchos sueños guardados
en aquel baúl oscuro,
que cerrado hubo de estar
por miedo a la tempestad.
Si fuera la tempestad
la que arribase con ella...
La ilusión se moriría,
los sueños se ausentarían,
la nostalgia volvería,
y la tristeza y la pena
en mi interior reinarían.
Al cielo pido mil veces,
que no traiga tempestad,
que sea la risa alegre
la que ilumine su cara,
y no sea la tormenta
quien la acompañe al llegar.
Mi corazon en un beso
J.G.L.