Dóname tus labios diamantinos.

Despierta tú, en la naciente aurora
Veo destellar la luz de tu mirada;
Y en tu fragancia celestial mi bella amada
Sublímas el amor que mí alma adora.
Mi amor, bien sabes tú
Cuánto amo las delicias de tu ser,
Que guardas hoy para mí,
Y en tu bella juventud
Acrecientas mi querer,
Por el amor que hay en ti,
Pasional en este dulce amanecer.
Sabes tú, mi distinguida,
Bella flor del edén de las mil flores;
Fresca rosa tropical,
Por tu lozanía escogida,
Y por tus bellos colores´
Que mí alma pasional,
Se muere de dolor por tus amores.
Ámame, donosa e indulgente,
Dóname tus labios diamantinos
Con los placeres delicados y divinos,
Que endulzan mí querer y mi presente.
Dame amor, tu alma eternamente, Y asume mis caricias con tu amor,
Ardoroso suave arrullador.
Delicioso, que por mí tu alma siente.
El poeta
desconocido.9/11/09