lamento

Quisiera escribir 

solo cosas hermosas,

y al mirar alrededor

tan solo encuentro

en el rostro del hermano

toneladas de dolor,

de cruel quebranto

de tremendo horror 

y aun mayor espanto.

Tristeza y desolación,

se mastica la amargura,

se respira falsedad.

Nadie dice la verdad,

y la realidad tiene visos

tan solo de hipocresía. 

Se engaña y se disimula

se hace reina la mentira

y todo se manipula.

Al cruzarse por la calle

nadie ahora se saluda,

la gente ya no repara

en el ciego que al pasar

tal vez necesita ayuda,

ese niño que se escapa

al borde de una escalera,

ese anciano que descansa

en cualquier banco del parque.

Desconsiderado un joven

va montado en bicicleta

con velocidad impropia

y carente de atención

a la gente que deambula,

y no hay quien le diga nada,

enarbolan sus derechos

desoyendo los ajenos

y campan así a sus anchas.

Quien gobierna se hace el sordo

nada importan los problemas

si son de los ciudadanos.

Las aceras están mal

para quien precisa silla,

desconchones y baches

por los cruces y asfalto

dificultando la marcha

de aquel que a pie no anda.

Podría seguir diciendo tanto

sobre errores y mas fallos,

sobre enfermedad y llanto,

de pobreza y desencanto,

de tormentos, desvaríos,

de egoísmo a raudales

de esos aires tan “letales”

de complicidades vanas

y tantas leyes absurdas,

pero se me van las ganas.

MG 19-10-2021