Me marca la huella del destino,
Ese que nadie sabe donde lo tiene
Porque el azar un día vino
Y quiso tocarme con la suerte
Vivo entre dos ciudades distintas
Una, la que unos ojos vieron como hermosa
Otra,extranjera pero mía
Que me acogió como adoptivay propia
Me sumerjo entre atardeceres rotos
Que llenan de placer mi estancia viva
Cuando salgo a la calle, miro y pienso
Que mi vida no es esta, pero es mi vida.
Medito y renazco en la locura
De no atisbar un futuro deseado
Pues no se sabe dónde y cómo
Estaré para abrir y cerrar mis ojos
No se duerman mis damas veladas del tiempo
no me rindo a sus placeres, sus encantos
Cada una tiene lo suyo
Y lo singular, se traduce en encanto
Me comparto entre sus calles
Las recorro, observo y siento
Que las quiero siempre juntas,
Con imaginación, así las prefiero,
Dos ciudades, con su historia
Un destino compartido
Un amor que al azar ha llegado
Mil ideas y un corazón dividido.
La felicito Marimar. La aliento a que siga escribiendo, realmente muy buena su poesía.