Te amo lento,
sutil…
aunque el corazón violento
no deje de latir.
Amo tus ojos,
tus labios,
tu todo;
el olor de tu cuerpo
cuando me acerco
y lo estrecho.
Tu risa,
tu voz,
tu todo;
tu aliento,
tu tacto,
tu dulce sonrisa,
tu energía y calor;
tu todo.
Te amo completo
o en partes
que es lo mismo.
En tus palabras
esta la inmensidad
de tu luminosa
presencia.
En tu sola risa,
la grandeza de tu alma.
En tu mirada,
la majestuosidad
de tu individualidad…
única…
deseada a mas no poder….
amada como nunca jamás.
Te amo en silencio,
mientras mis ojos gritan
que te quiero conmigo…
mientras mi cuerpo
anhela tu abrigo…
mientras mi sangre fluye
cual torrente
de amor desbocado…
por mi corazón
descerebrado.