La vida tiene estaciones, Tàn iguales como un trèn. Desde que naces, Hasta que mueres! Son vagones, Al cual uno solo puede, Escoger el que uno quiere... Cuando subimos y bajamos, Nos damos cuenta. Que cada uno de sus asientos, Es nuestro tiempo! Que para unos quedan vacios... Y otros llenos. Son los años lo que ocupan Vida y aliento! Y cuando el tren, A cruzado tantas estaciones. Por las vìas del bièn, Hemos obtenido el mejor equipaje... Cubriendo cada asientos De nuestro propio trèn. Y cuando llegemos a la ùltima estaciòn, Trataremos de bajarnos ante! Pero cada quièn tiene un boleto, Y tendrà que ir valiente a ese reto! A cerrar las puertas de su propia estaciòn. Y se montarà en otro vagòn, A los rieles de Dios. SOL.