El amor despierto...

El amor comienza con una despedida.
Un aleteo suave de palomas en el balcón que se escapan fugitivas
sin complejos a la noche.
Una oración de murmullos y escondrijos.
Una oración que vuela sin apercibir riesgos ni distancias.
¡Cuidado! También la oración más sincera está sujeta a la gravedad.
El cuadro inconcluso de Picasso está al fondo del armario
de roble en el dormitorio familiar.
¡Espejo roto con la imaginación!
La niña coge el amor como un polo y lo saborea.
¡Todavía está verde!
En el porche avanza descalza la mañana.
Una rosa de terciopelo cárdena de espinas finas
se despereza ociosa con insomnio de belleza efímera.
Atravesada por suspiros y alientos de melancolías.
Se toma el amor una copa de rocío en la copa de la Cala.
¡Abrumadoras esencias de naturalezas vivas!
pio espejo 29 abril 2006