Sabes que está abierta,
pero la evitas…
Sabes que no existen trabas
no cruje, o tiene vidrios rotos
por donde penetre el agua lluvia.
La miras desde lejos,
no te acercas porque su aroma
te podría llegar a ser familiar.
Sabes que está abierta.
La miras desde lejos…
Te invita como el “Bar” a un solitario,
como la flor a los colibríes,
como el agua a los sedientos.
Tienes sed, sed de amor;
pero miras desde lejos
Temes a mis brazos abiertos,
a mi sonrisa expuesta,
a mi cariño extenso,
pero talvez mas…
A ti conmigo.