Silencio conveniente
sin dirección y sin remitente,
mensaje en blanco enviado,
no hay testigo, en pecado.
Burla que omite lo acordado,
sentencia de pacto marcado.
Indecisión de frase torcida,
muy a la usanza de sus días.
Donde ni el más fuerte podía. . .
quitarse la careta por muy fría.
el alma se congelaba y moría.
Sin remordimiento era asesinada,
delirio de persecución sobraba,
no hay hábito sin monja,
ni fiesta sin lisonja. . .
Así llega la duda y la deshonra.
Así el cadalso estorba.
Muerte fulminante es su obra!!