A ti, que caminas con la luna en tus ojos, y con el sol en tus palabras, te escribo, mujer, hermana en el tiempo. Veo tus luchas, tus sueños, tus silencios, tus manos que sostienen el mundo, tus pies que bailan sobre las sombras. Conozco tus noches de insomnio, tus días de incansable vuelo, tus momentos de duda, tus instantes de claridad. A ti, que has tejido esperanzas con hilos de dolor y alegría, que has llorado en la soledad, y reído bajo la lluvia. Te veo, en tus victorias, en tus caídas, en tu fuerza, en tu vulnerabilidad, en cada paso, en cada pausa, en cada suspiro, en cada mirada. A ti, compañera de viaje, en este camino de estrellas y de espinas, te ofrezco mi voz, mi hombro, mi risa, mi comprensión, sin juicios, sin prisas. Somos ríos que fluyen juntos, montañas que se elevan, cielos que se abrazan en la distancia, somos mujeres, unidas, infinitas. En ti, me veo reflejada, en tus batallas, en tus abrazos, en la mujer que eres, en la mujer que soy, en la mujer que somos, juntas, siempre.
A ti compañera de viaje en este camino de estrellas y espinas / muy bien. Otra hermosa poesia