Si yo pudiera tenerte a ti esta noche,
para regalarte amor, placeres en derroche.
Extasiarme de anhelos, de besos, de caricias que me propicies fuego, mientras suena la brisa.
Si tú pudieras satisfacer estos deseos
de verte hundir tú ser y entrelazar nuestros dedos
Y en el placer sublime que provoque nuestro tacto.
Escribirte cosas bellas, murmurar en tu oído.
Decirte que te quiero, sentir que tú me quieres.
Si tú pudieras ungir todo mi cuerpo,
con la saliva ardiente que produzca el encuentro.
Tendría tu sabor por siempre, el sabor que he soñado,
sabor del hombre que yo ansío, del hombre añorado.
Se que no podemos, porque lejos estamos,
no te diré mí angustia, al ansiar tu querer,
Yo sé que, siempre en mi estarás aunque lejos de mi estas.