Estoy cerca de ti, un rayo de luz calienta tu cara,
es el amor que sale como un sol de mi alma,
es el ultimo regalo en que, Dios aun me ampara
y consuela a mi corazón que por tu beso reclama.
Sé de tu amor, en cada estrella brilla tu beso sincero.
Hoy me he permitido contemplarte sin llorar,
se está llenado mi pensamiento de tanto te quiero,
mis ojos baña tu cuerpo en último delirio, al divagar.
Al azar ahora está nuestro destino paralelamente,
mi sol también calentara tu día y mi noche tu luna,
pero las lágrimas de mis llantos serán mía solamente,
mientras observo el jardín y oigo tu canción de cuna.
Ahora no te recuerdo, pues aun estás conmigo.
Suelto mi verdad contemplando ultima vez tu rostro,
el deseo de felicidad en nosotros ya es de amigo,
escena fantasmagórica está en el invisible espectro.
En la sombra de mi sombra te empiezo a buscar,
tu esplendorosa figura pasa al lado oscuro de mi vida,
me estoy llenando de suspiro y no puedo descansar,
voy camino al calvario, voy sin rombo a la deriva.
Autor: Alcibíades Noceda Medina
¡Bendito rayos que iluminan tu firmamento! Bienvenido los deseos de la felicidad. La amistad fijada en el testamento, de dos amigos que pasarán a la eternidad. Un gran abrazo,poeta.....mi eterno cariño,SOL