“Al cielo pido clemencia . . .â€
                                        Â
Quiero abrazar a mis nietas
preciosas dulces, inquietas,
tengo dÃas que no las veo,
que estén bien solo deseo.
Donde quiera que, éllas, anden
espero del mal se guarden,
que recuerden que las amo
de flores les mando un ramo.
Por internet hago entrego
haciéndole a Dios un ruego
a través de mis plegarias
y mis oraciones diarias.
Que las cuide bien le pido
pa’ su abuelo consentido
que haga corto mi calvario
beso, fiel, un relicario.
He llorado por su ausencia
al cielo pido clemencia
que no se alargue mi pena,
que ya pase esta condena.
Â
Que la misma tenga fin,
el DÃa de San ValentÃn
creà que estarÃan conmigo
no merezco este castigo.
Siento que también me extrañan
mis sentidos no me engañan,
por medio del pensamiento
nos damos un mutuo aliento.
Al pie de La Gualupita
elevo súplica escrita
le puse su veladora,
pues, mi alma está imploradora.
Autor: Lic. Gonzalo Ramos Aranda
Ciudad de México, a 16 de febrero del 2019
Dedicado a mis nietecitas, Marijose y Mayté, ambas de apellidos RodrÃguez Ramos . . .
Reg. SEP Indautor No. (en trámite)