Por Elí Tanguyú
Perdona si en mis desvíos
Miro el fulgor de tus ojos,
Para calmar los sonrojos
Que su luz causa en los míos.
Porque al hacerlo no intento
Quitar tu embrujo divino,
Lo hago así porque ilumino
El deseo en mi pensamiento.
Para tener en mi vida,
Si tú lo quieres, ternura,
Y un poco de tu dulzura
En el corazón metida.
Y beber del borde inquieto
De la red de tus pestañas
Todas las cosas extrañas
Que tú sueñas, en secreto.
Y soñar, soñar que llego
cada tarde hasta tu reja
Suspirando en cada queja
Para envolverte en mi juego.
Perdona los desvaríos
Por el fulgor de tus ojos,
Yo calmaré los enojos,
¡con el llanto de los míos!
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ELÍ TANGUYÚ
Excelente poema en redondillas. Son para tí mis diez plumas de admiración. Saludos. Marfucas.