Ya no puedo pensar en mi vida,
Negué mi propio camino de dudas,
No pude encender los rincones oscuros,
Hasta que comenzó a dolerme,
De nuevo la herida.
El dolor me despierta en la noche,
Tu indiferencia me robo la sonrisa,
Me parece que vives en mi vida,
Eche a cara o cruz, mi vida.
No supe como afrontar,
Lo que yo creí, que era pecado.
En mi propio camino,
Tú, pusiste el castigo,
Ya no puedo abrazarme a la calma,
Una fuerza de dolor me doblega,
La confusión me impide ver.
Más allá de mi propia verdad,
Se que hay un mundo nuevo, pero…
El recuerdo se ha quedado, con mis ganas.
¿Tendrá fin el llanto de una mujer?
Con que medida de tiempos se calcula el dolor…
Deja de sonar corazón
Detén el tic tac que aviva mi dolor,
Haz que no estalle el corazón,
Herido ya sin ilusión.
Esta noche vuelves corriendo contra mí,
Roba mi corazón negro y perdido,
Húndelo en la profunda oscuridad,
Remóntalo hasta donde no alcancen, los miedos.