Te solté, como se sueltan
en el aire los átomos,
las aves y los sismos
terrenales,
como se suelta la arena
y vuelve a ser parte del mar,
como una lágrima celosa,
que se escapa, en las mejillas
del olvido,
como una jungla, un fiordo
al precipicio...una ilusión,
como la flor al viento
la música al oído
la voz al ruiseñor...
como una rotura del alma
un desgarro, un sínodo
de paisajes de embeleso...
como el globo al niño
como el niño a la niñéz,
te solté, como el adolescente
que no adolece de nostalgias,
como un beato a su pecado
como la paz a la guerra...
Como el amante a su destierro,
te solté, y ahora entiendo
porque la agonía
me supera a cada instante!