Yo no soy quien escribe...
es mi otro compañero, que detalla mis reverencias,
es el color de este cielo azul,
estas manchas de humedad en las
paredes de mis muros internos,
es el sumidero de los arrogantes
la ocasión de una muralla cobarde,
el deseo de no tenerte
y el odio de querer que estés,
es el posible rompecabezas de la vida,
es la pobreza de un interludio.
yo no soy quien escribe...
soy el manadadero de tus ojos,
el atorrante distinto de un tango
de Discépolo,
el verborrágico pastor
de los entremeses nocturnos,
el poder de las tinieblas,
el Señor de los cielos eternos,
y si no soy yo quien escribe...
quien sino dudaría, de que eres tú,
quien maneja mis dedos ya caídos.