Ven, tan solo ven,
abre tus brazos, yo entraré,
de tus labios quiero yo beber.
Ven, tan solo ven,
en mi cuerpo extraño el calor de tu piel;
ven, tan solo ven,
quiero respirar del aroma de tu ser.
Y desperté para seguir soñando
y en sueños Te Amé, Te Amé como ayer
y desperté para seguir soñando
y al abrir los ojos te pude ver,
descansaba tu cuerpo a lado mío,
tierna y cálida piel que en sueños abrigué;
tus cabellos alborotados
entreabiertos tus labios de miel,
respirabas suspirando,
te contemplaba suspirando yo también,
abriste tus ojitos, abriste tus ojitos mi bebé.
-Buen Día Amada Mía.
Beso tu frente con mis manos
y saludo tu cuerpo con mi piel.
-Buen Día Amada Mía,
despierto te soñé.
Carlos Manuel