Alfredo mi amigo
Viajé a la ciudad del Ebro
pasando un mal momento,
conocí un amigo nuevo
que es grande por fuera y por dentro.
Alfredo, me invitaste a comer
"migas" en un gran restaurante,
¡cuantas veces yo comenté
cómo las hacia mi padre!
A Zaragoza llegué triste y mal,
mi corazón no paraba de llorar,
recé y lloré ante la Virgen del Pilar.
Le pedí que reforzara nuestra amistad.
Te escuché y me escuchaste,
algunos consejos te dí,
tu corazón es noble y grande.
Tu historia no es nueva para mí
A mi casa ya he llegado
contenta por el día pasado.
Mi meta ya conseguí,
visitar a mis amigos, pasar un día feliz.
Tengo que decirte, Alfredo,
que siempre me tendrás a tu lado.
Recuerda que el respeto y la amistad
son los regalo mas preciados.
Para mi amigo Alfredo Asiain. Jucrema
Nunca habÃa leeido algo que me calara tan hondo el alma,escribes muy bello,además me identifico mucho con tu poema SIGE ASI!!!!!!!!!!!!!!!!!!