Rojas pestañas de tanto quemarlas, ya quieren descanso,
yo les doy regazo y un cómodo edén,… porque valen…
piedra suave en esta tierra, deleitoso sufrir…
de quien te hace grande en montañas de gente.
Desde el macilento hombre de piel tosca y…
con los húmeros desgastados, aquellos
a quienes mi afán de verlos Alguien…
¡Son ya!... Hombres de Bien, son Fuertes.
Hombres que esperan el hombro de su cuerpo…
mas no, del aconsejador, por de mas, solo eso…
un sabio y buen aconsejador, pero grande…
solo desde sus dientes hasta la lengua.
Porque ellos son el puente de la economía al vientre,
porque ellos piensan en momentos difíciles,…
y porque quieren creer que la vida es una lucha…
en donde van cual propios soldados,…¡Bien armados!...
y de tras de ellos,… hombres que miran el mover
impetuoso de tus sombras Implacables.
Creontte Idilio
Agosto del 2006