Que ojos bonitos
que tiene mi amigo,
y esa cara de bueno,
que lo hace más lindo.
Son nuestras charlas,
sanas y tranquilas,
y sus buenos consejos
me alegran la vida.
Cuando conversamos
el tiempo no existe,
y es al despedirnos
que me pongo algo triste.
Pero al encontrarnos
ya me alegra el día,
y con su linda charla
me vuelve la risa.
Que ojos bonitos,
que tiene mi amigo,
de mirada tierna,
tan clara y tranquila,
hoy al conocerlo,
me quedé impactada,
nunca imaginé su rostro tan bello.
Pero no es por eso,
que estoy encantada,
es porque lo siento
tan bueno y sincero,
que me alegra el alma,
que sea mi amigo...
Elsa Fariña