En esa agenda vivencial

Ahì donde adornè tu nombre
donde hice giros y borrones
por mantenerte cerca.
Ahì los dias han ìdo dejando
pàginas en blanco, hojas sin palabras
que de tanto verlas, mis ojos añoran
esas dulces palabras para recordarte.
¡Y sabe Dios, de que te recuerdo!
sabe y en silencio consuelo me brinda
èl me dice que aburrido te fuistes muy lejos
porque ya ni paciencia tienes
y tu vida, en un calvario la convertistes.
¡Y decias ser mi amigo!
èl que amaba hacerme compañìa
y de tanto pregonarlo,se cansò tu alma
dejando cabida a esa soledad
ese espacio lùgubre y solitario
que has elegido por morada.
¡Ya es hora que despiertes!
a que repares y cambies
hay mucho amor para sostenerte
y mucho calor humano para acompañarte.
Deja tus pesares y vuelve
la vida tiene siempre novedades
historias nuevas y canciones
que espero alguièn HOY DÌA
te las cante.