Mi Señor de las Excusas
Ahora no pone excusas,
pero tampoco habla claro,
mejor dicho, ni siquiera,
me dedica unas palabras,
¿qué le estará pasando?
Me tiene algo preocupada...
Mi corazón tiene dudas...
y si yo no lo quisiera,
nunca me haría preguntas.
Ya no sé cómo acercarme
y no quiero ser cargosa,
Mi Señor de las Excusas,
¿será que tiene otra?
Tal vez se haya enterado
de los ojitos de miel,
sin embargo estoy segura,
que un día ha de volver...
El cariño que le he dado,
no es un cariño cualquiera,
creo que está enfadado,
o tal vez algo asustado...
La cosa es que ya no viene,
como antes a decirme,
que los mil voltios de mis manos,
lo tienen loco y enamorado.
Con su buen día con brillos,
su saludo de diamantes,
Mi Señor de las Excusas
¡ya no viene como antes!
Elsa Fariña
Oct.2003 - 01/06/04