Palpita mi alma al saberme
mirada, y se conmueve mi corazón por tus adivinas
palabras,
tu fuerte voz resuena en mi cielo, y avanzas en mi firmamento
devorando espacio a travéz
del viento, venir te siento como huracán y en tu soplo abrazado, respiras mi aire y mi aliento, recupera el pasado,
llena el presente y remonta el futuro, de mis pensamientos.
Veo nuestras risas francas,
y más sinceras aún siento
cuando nuetras miradas, siempre de algunas penas o alegrias
están mezcladas.
Nuestros cantos
mas dulces, son aquellos que de tristeza, amor y tormentos hablan, siento tu corazón humilde y el temor y el fiero orgullo te mezcla, te apoderaste de mi mente
¡oh espíritu vivente!,
contigo no es posible el cansancio,
ni el aburrimiento, tú amas
y tu amor jamás sucumbe, y en tus letras está el alma,
tu corazón y tu llama.