Las almas lloran su inocencia

Asir en lo imposible es desatino,
a pesar sin ti, me llena de tristeza.
Mas allá del amor, sé con certeza
que no debo alterar tu destino.
Dejo en tus manos la decisión,
sepas amor; que no busco alivio,
nos adoramos aun estando previo,
a la irremediable separación.
Es doloroso alejarse sin desamor,
los dos no deseamos ésta libertad,
pues junto vivimos amor de verdad.
Nuestra vida junta es todo primor.
Las almas lloran sus enormes inocencias,
en verdad, ajena de las circunstancias.
Autor: Alcibíades Noceda Medina