Dios, se fue otro año,
Se fue otro día sin verte, sin tocarte y perderme
en un cielo iluminado.
Es de noche, y mis ojos se llenan de melancolía,
Se llena el alma de desesperación, ya que en el
horizonte no logro hallarte,
Por más que te busque, sé que no te encontrare.
Una botella, más amigos, pero nada llena este
vacío,
Nada cubre las palabras de tus labios,
Tu pelo brilloso como el oro, o tus manos tiernas
de amor puro y sincero.
Ya uno se da cuenta que las horas pasan, que los
años se van,
Y que mas allá de todo, nada tiene sentido,
Que nada sirve, sin sentirte,
Veo que lejos estoy de todo,
Que mi único amigo es el dolor.
Solo queda el saber, que eres feliz, con tu gente,
tu familia,
Sé que te aman, quizás más de lo que yo te amaría.
Me duele, me duele demasiado,
Comprendí que debo llevarlo a cuesta y seguir
soportando,
Solo quiero decirte que en este año, mi amor por
ti sigue intacto.