¡Oh dulce felicidad!
En que esquina, tú te encuentras
que sufriendo, estoy yo mientras
en la eterna oscuridad.
Dichas hubieron muy pocas…
Más tristeza que alegría
que la suerte no me fía
y mis ansias tu no invocas.
¡Dime, si viene o no viene…
La dulce felicidad!
Que busco con la verdad… ¡Y ella ante mí, se contiene!
En la memoria yo guardo
lo bueno, ¡Y también lo malo!
Sin querer, yo le señalo
Y de sus hechos,no alardo.
Cuando te veo cruzar
a mí lado, y sin parar
me pongo yo a suspirar
¡Más, no acabas de llegar! Acostumbrada me tienes la razón, ¿tal vez, tendrás?
¡No me cargues con más piedras!
¡Ni mi corazón apenes!
¡Oh dulce felicidad!
La que todos esperamos,
fuerte asidos, nos hayamos…
En procura de piedad!
Asun
12/11/2009
Nunca habÃa leeido algo que me calara tan hondo el alma,escribes muy bello,además me identifico mucho con tu poema SIGE ASI!!!!!!!!!!!!!!!!!!