Olvido Repentino

Noche silenciosa, naufragio de dos almas
con penas y tristezas
conjugadas con la mentira vacilante
cubierta de sueños fugados
tocando la última frontera
de tu ser; todo pasa, queda todo
en el olvido repentino.
No se dice un te quiero o el oportuno te amo
que alivian las trampas del alma,
anclando el mensaje espiritual
asociando a la tempestad carnal
del olvido repentino.
Me detengo ante la pared de ilusión
de no poder traspasar
el umbral de tu corazón
espina lacerante, carcomiendo
la malograda desesperación
del marchito olvido repentino.
Observo desde lo profundo e indescifrable
del espejo de las dudas que se yergue,
llenándose de amarguras; enmudeciendo
la esperanza de volver a estar contigo
sigue implacble ante el olvido repentino.