Soy otra persona, se cambio mi vida,
Tengo el alma triste y mi piel dormida.
Cada amanecer es para mi oscuro,
mi cuerpo lo siento rodeado de un muro.
Ya no soy la misma, vago lentamente,
me siento distinta, soy tan diferente
que no reconozco mi voz, ni mi risa,
ya nunca me apuro, pues no tengo prisa.
Antes era alegre, dispuesta, preciosa,
me gustaba el baile, el lirio la rosa,
tenia en mis manos miles de ilusiones,
cantaba bajito todas las canciones.
Ahora me encierro para ser dichosa,
No quiero en mi puerta ni una mariposa.