Cuando duele la llegada
De la alborada,
Y su luz ciega la mirada,
Es por que de llorar
Rojos están los ojos,
Y desnudos los pies Sobre el rastrojo…
Nos falta espacio
Es estrecho… y es poco el aire
Que entra en el pecho.
Cuando duele estar viva,
Es por que nuestra barca
quedó dañada y a la deriva,
Y el alma siente que no es querida…
Duele vivir con sueños prestados…
Vencidos…mutilados,
Es como un alba que no ilumina nada,
Por que fue brutalmente lastimada,
Herida…ahogada…
Pero si crees que ha concluido De mi voz la palabra y los sonidos,
Te has equivocado…
¿Sabes por que?
Por que el telón de mi vida
Recién se levanta, y quiero
No tener más Ese fantasma que espanta.
Por que no hay distancia
Ni tiempo, ni olvido…
Para este gran amor
Que solo se nutre de esperanzas y valor…