Entrégame tus sueños,
ponlos aquí, en mis manos
sin miedo de perderlos,
que no voy a robarlos;
tan sólo quiero hacerlos
radiante realidad.
Quiero ayudarte a darles
cuerpo, vida y aliento;
quiero ser tu complemento
y darte mi felicidad.
Prometo respetarlos,
cumplirlos puntualmente,
tu sueño más ferviente
será, en muy poco tiempo,
una parte de tu vida
(tal vez, la más querida)
tenme un poco de fe.
Yo conozco de sueños,
sé cómo realizarlos,
daré vida a los tuyos,
serán -- como capullos
que yo haré florecer.
Pues realizar tus sueños
es mi forma de amarte
y en éllos quiero darte
mis propios sueños, mujer.-
Eduardo Ritter Bonilla.