Son cual flor que adorna la tierra
en el jardín de la imaginación,
son la esencia a la vida,
son la ternura y la comprensión.
Las caricias de ellas son placer…
una fina sensación,
un coito lleno de dulzura
cuando sintiendo la hermosura
me lleno de asombro he ilusión.
Son un consuelo para el hombre,
son la máxima protección
cuando siendo aun niño,
en sus brazos encontré amor,
sus pechos saciaron mi hambre
y en sus manos el calor.
Fue un ángel el que me cuido,
fue mi madre, que en su vientre
por nueve meses me formo,
siendo mujer… a ella alabo yo.
Sus alas dejo en lo alto, una nube se las llevo,
vestida con cuerpo humano
se dedico a dar amor; ahora veo a las mujeres
y las admiro con devoción,
son seres de encanto, que dan a la vida color
son ángeles caídos, son la máxima creacion.