Busqueda Avanzada
Buscar en:
Título
Autor
Poesía
Todos
Ordenar por:
Mas recientes
Menos reciente
Más vistas
Defecto
Poema
Categoría: Sin Clasificar

FALSEDAD, ABANDONO Y AUSENCIA

Te busqué locamente en los intrincados caminos donde podría existir un recuerdo de ti.


Hallé en los recodos de mi soledad el fantasma de mi madre que lloraba al ver el llanto de su hijo.


Solo encontré jardines marchitos donde los pájaros reclamaban su miel.


A lo lejos contemplé la mirada de una extraña luna famélica.


Miré el cadáver de los ríos secos, sin risas y sin lagrimales.


Los árboles perdieron su vaivén por la muerte del viento.


Vi cadáveres ambulantes gritando henchido la maldad de sus corazones.


Vi la mentira galopar oronda en la boca de los hombres aladinos.


Escuche de sus bocas mil promesas con aguijones en su alma de animal quilífero.


En su mirada estaba instalada la espantosa medusa que petrificaba corazones.


En su risa de geoconda maléfica se encerraba la perversidad del mundo.


Sus labios era la planta carnívora de falso erotismo que devoraba las victimas desprevenidas.


Las hadas mágicas habían perdido sus brillos y sus poderes ante la soledad humana.


Los sentimientos y las palabras se convirtieron en instrumento de incertidumbre.


Reinó el poder de las palabras vacías y los corazones con sangre de guillotina.


Su risa de coral esquilmaron el último vestigio del amor.


Los árboles renunciaron a su sombra hasta que regresara el amor a los corazones.


Aquella abeja lloraba inconsolable por no poder endulzar aquellas almas que se vendieron a la mentira.


Nada les importó destruir el alma del otro.


En sus pechos se ausentó el latir y se instaló la piedra.


En una esquina del tiempo lloraba y contemplaba la ausencia del amor en el alma de los hombres.


Veía en su mirada de cadáver sus odios y sus desprecios.


Prefirieron aniquilar o morir para no resistir la presencia del otro.


Consulté en los oráculos del mundo para reinstalar el amor.


Pero todo fue inútil.


Terminé consumido en una borrasca de dolor y desconsuelo.


Conocí los corazones cuando se ocultan en mil máscaras.


Al no poder me oculté en la espesura oscuridad de la indiferencia.


Llevaré en mi mirada la huella y el silencio del amor.


Mañana seré un cadáver con una sonrisa tenue en mi rostro.


Un extraño fósil en la historia para los antropólogos del amor.


Una pista para reinstalar la pasión.


Un mundo para la inocencia y un nuevo latir de los corazones.


Unos rayos renovados de un nuevo sol.


 


 


 


Por: Manuel Guillermo Ebratt Doncell


Barranquilla, Febrero 6 de 2015.

Datos del Poema
  • Código: 373559
  • Fecha: 31 de Diciembre de 2015
  • Categoría: Sin Clasificar
  • Media: 0
  • Votos: 0
  • Envios: 0
  • Lecturas: 560
  • Valoración:
Datos del Autor
Nombre: Manuel Ebratt Doncell
País: ColombiaSexo: Masculino
Fecha de alta: 26 de Octubre de 2015
Ver todas sus poesías
Comentarios


Al añadir datos, entiendes y Aceptas las Condiciones de uso del Web y la Política de Privacidad para el uso del Web. Tu Ip es : 18.217.144.32

0 comentarios. Página 1 de 0
Tu cuenta
Boletin
Estadísticas
»Total Poesias: 99,627
»Autores Activos: 4,260
»Total Comentarios: 47,522
»Total Votos: 9,266,099
»Total Envios 159,596
»Total Lecturas 142,892,756

© HGM Network S.L. || Términos y Condiciones || Protección de datos | Política de Cookies