Tampoco a mí me gustó
hablar de corazón marchito,
es que fuiste tú...
quién lo dijo el otro día.
De ahí es que tomé
esa frase, vida mía...
Nadie mejor que yo,
para saber que tu corazón,
es como el árbol frondoso,
de las cuatro estaciones.
Que me cubre con sus ramas
que me da frutos de amor.
Pero no te ofendas, amor,
tu corazón no es marchito...
tu corazón es la sabia
y por tu tallo respiro.
Tu corazón es el fuego,
que con el mío se juegan,
en un sólo sentimiento,
cuando a la pasión se entregan.
¡Nunca lo olvides!
;o)
Elsa Fariña
23/03/04