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Categoría: Angustia

Amor y Miedo a la Muerte

1
¡Qué contradicción más grande:
Tenerle Miedo a la Muerte,
Si sólo el que muere nace
A la Vida que no muere,
Pues de la Muerte renace! 2
Sé que para verle a Dios
Antes tendré que morirme,
Pero morirme no quiero
Y sí quiero verle a Dios.
Explícame, si es que puedes,
Tan grande contradicción. 3
Mi Fe me asegura que cuando me muera
A Dios voy a ver. Mas yo te aseguro
Que ya habría muerto de Santa Impaciencia,
Si me lo creyera. 4
Tenlo por cierto:
Los que se mueren
No nos dicen ¡Adiós!
Nos dicen ¡Hasta Luego!
Consuélate pensando
Que pronto nos veremos.
Luego, por tanto,
No les lloremos.
¡Ya están de Dios gozando!
¡Ya acabó su Destierro! 5
Esta Vida pronto pasa.
Y mientras llega La Otra
Todo lo que en ella pasa
Es un paso hacia La Gloria.
Bajará el Cuerpo a la Tierra.
Subirá el Alma a Los Cielos.
¡Que envidia debieran darnos
Los que con Dios ya se fueron! 6
Jesús, cuando me muera
Y me lleves Contigo,
Compararé Tu Cielo con La Tierra
Y veré cuántos años
Un Desterrado he sido
Viviendo en ella.
Jesús, cuando me muera,
Y me lleves Contigo,
Compararé Tu Cielo con La Tierra
Y te reprocharé que tantos años
Me condenaras a vivir en ella.
Jesús, cuando me muera,
No te voy a pedir ninguna cuenta:
Tendrás para pagarme por delante
La Eternidad entera
Y Tu Amor infinito demostrarme. 7
Señor, yo quiero irme
Contigo ya.
Y Contigo quedarme
Viendo pasar al Tiempo,
Pero sin yo pasar.
Si me tienes más tiempo en este Mundo
Se me va a hacer el tiempo que me tengas
Toda una eternidad.
¡La Eternidad que espero y que no llega! 8
Jesús Mío y Dios Mío:
Si la Muerte es el Precio
Que he de pagar por verte,
¡Bendita seas Muerte!
¡Bendito seas Precio!
¡Qué barato me pones,
Jesús, comprarte El Cielo! 9
Si la Muerte es la Puerta
De Entrada al Cielo,
¿Por qué, por qué Dios Mío
A abrírmela te niegas?
¿Cuándo, cuándo, Dios Mío,
La veré abierta?
¿No ves, no ves, Dios Mío,
Que si cerrada sigue
Moriré de Impaciencia? 10
Si Dios me espera
Más Allá de la Muerte,
Que nadie espere
Que mi Esperanza muera.
Morirá mi Esperanza,
Sólo cuando yo muera
Y se me haga en Los Cielos
Logrado anhelo.
Posesión plena. 11
Morir es presentarse
Ante Dios, que te llama
Para juzgarte.
Después de que te juzgue
Toda una Vida Nueva
Para ti empezará.
Si en Cristo confiaste
Morir no temas.
Tu Fe te salvará. 12
Cuando me esté muriendo,
Decidme: ¡Dios ya llega!
Y me moriré en Paz.
En la Paz que nos da
Saber que al que esperabas,
Esperándote está. 13
Haz, Dios Mío, del Día de mi Muerte
El Día más dichoso de mi Vida.
Pues, Señor, ese Día,
Ya no te iré a buscar.
¡Vendrás a verme! 14
Cada paso que doy,
Huyendo de esta Tierra,
Más y más, Jesús Mío,
A Ti me acerca.
Ya estoy pisando El Cielo.
El Cielo, a donde voy,
Y en donde Tú me esperas. 15
Ahora que mi Vida
Voy desandando,
Sólo me tomo en serio,
A la Muerte, en La Tierra,
Y a Dios, en Los Cielos.
Lo demás, no cuenta. 16
Tan sólo una vez te mueres,
Pero naces a dos Vidas
Cuando naces:
La que da vida a tu Cuerpo.
La que a tu Alma da vida
Y en Dios, Eterno te hace.
Muerte y Vida. Vida y Muerte.
Unidas vais. Vais unidas.
Es Dios vuestra misma fuente.
Dos Tiempos y una Partida.
Y un Arbitro que la arbitra
Y nada deja a la suerte,
Porque todo a Su Justicia
En Los Cielos y en La Tierra,
Se somete. 17
La Vida empieza al nacer
Y en la Muerte no termina.
Nacimiento y Muerte son
Los dos grandes episodios
Que jalonan nuestra Vida
Sigue la Muerte a la Vida,
Sigue la Vida a la Muerte
Para seguir siendo Vida.
La Vida no muere nunca.
Sólo engaña a nuestros ojos:
Se trasforma y continúa
En el siguiente episodio,
Que ya eternamente dura. 18
He puesto en Ti mi Meta, Jesús Mío,
He arrojado de mi cuanto me pesa
Y andar y andar me he puesto,
Aunque andar tanto y tanto ya me cuesta.
Para llegar a Ti, de andar no paro,
Que a Ti se llega muerto. O no se llega. 19
Yo, que de Amores muero,
Hasta el Amor desprecio,
Si Amor ha de morir cuando yo muera.
Si Dios no me asegura que es Eterno.
Yo voy buscando algo que no muera.
¡Yo que sé que algún día he de estar muerto! 20
Si Tú no estás, Señor, tras de la Muerte.
Si cuando muere el Cuerpo, muere el Alma,
El Bien y el Mal sentido ya no tienen;
Y un Engaño aplazado
Has hecho de esta Vida atormentada.
Si Tú no estás, Señor, tras de la Muerte,
Para a todos juzgarnos,
A la Ley del Amor ya has derogado
Y has hecho que el Placer y el Egoísmo
Queden por siempre ya justificados,
Pues no habrá Crimen, Premio ni Castigo.
Ya no serán dichosos los que son.
Dichosos lo serán los que no han sido,
Pues solamente ellos
Al Mal, a la Injusticia y a la Muerte
Ni podrán conocer ni han conocido. 21
Si has muerto de Amor por mí,
Para parecerme a Ti,
Jesús, también yo quisiera
Morirme de Amor por Ti.
Venga, pues, la Muerte a mí
Y váyame yo con Ella
Para irme ya junto a Ti. 22
¿Qué fui antes de nacer?
¿Qué seré cuando me muera?
Te juro que no lo sé.
¿Seré una Pasión inútil
Suspendida entre dos nadas?
¿Tan sólo eso seré?
Siempre me quedo pensándolo.
Nunca lo puedo creer. 23
¿Qué importa que Dios exista
Si no es nuestra Alma inmortal?
¿Qué importa que Dios exista
Si en vez de ser Nuestro Padre
Se desentiende del Mal
Que nos hagan o nos pase?
¡Qué tormento, cuánta Angustia
Que mana del pensamiento
Cuando nos muerden las Dudas
Y se hace la Fe Misterio! 24
Si el Hombre antes de nacer,
Nada era
Y nada volverá a ser,
Cuando muera,
¿Nacemos ya condenados
A la pena de no ser
Sino un Algo entre dos Nadas?
¿Nacemos ya condenados
A la pena de no ser
Sino un Pasión Inútil
Que el Tiempo, al pasar, se traga
Pues al volverse Pasado
Volver nos hace a la Nada?
Jamás me podré creer
Que para ser y no ser,
Dios, a la vez, nos creara. 25
Esta Vida, triste y corta
Nada importa.
Importa la Vida Eterna.
Sólo en Ella.
Esta Vida se prolonga
Y el mismo Dios se nos muestra.
Y con su sola Presencia
Se encienden todas las Sombras.
Y se hacen Luz las tinieblas. 26
Esperando la Llegada
De la Muerte, que no llega,
Van transcurriendo las horas
Del Dolor, hecho Existencia.
¿Qué importa que el Tiempo pase
Si la Angustia se nos queda?
Por no morir, la Esperanza
Se volvió Inquietud de Ausencias
Y sin saber qué esperamos
Nos morimos de Impaciencia.
Ven, Señor, a recordarnos
Que Tú eres la Gran Promesa:
Sólo el que muera a Esta Vida
Nacerá a La Vida Eterna. 27
Has hecho de tu Vida una Carrera
Y a fuerza de esforzarte, la has ganado:
¡Ven y recoge ya tu Recompensa!
Como un Santo viviste en esta Tierra.
Ven ya al Cielo a vivir entre Los Santos. 28
La Esperanza es el Gozo anticipado
De un Bien que está llegando
Y que antes de que llegue
Ya lo das por llegado.
Y esa Esperanza es Dios
Que desde el Más Allá,
Te está esperando. 29
El Tiempo pasa, corriendo,
Buscando a la Eternidad,
Para dejar de ser Tiempo.
Para dejar de ser Río,
El Río pasa corriendo
Para convertirse en Mar.
El Tiempo, el Río y el Mar,
Tienen, como el Alma mía,
Sed de Amor y Eternidad.
Sólo Dios, cuando me muera,
Me podrá esa Sed saciar. 30
La Muerte, Muerte no es.
La Muerte sólo es el Tránsito
Que Eternos nos hace ser.
Los Hombres en esta Vida
Estamos sólo de paso.
Somos unos Peregrinos
Hacia El Cielo caminando.
Y como Dios nos espera
Alegramos el camino
Soñando que a Dios llegamos.
Soñando que Dios ya llega. 31
Si Tu Luz se me oscurece
Caminaré entre tinieblas,
¡Hasta topar con la Muerte!
Espero, Señor, espero
Que me esperes tras de ella. 32
Del Amor a la Vida
Nace el Miedo a la Muerte.
Mas la Muerte no es muerte:
Es un cambio de Vida
Para cambiar de suerte.
Dios está ya a la vista
Y dará a cada uno
Lo que ganó y merece. 33
Cuando te mueras
No se te hará de Noche.
Cuando te mueras,
Verás salir el Sol que no se pone.
Cuando te mueras
Verás amanecer en plena Noche.
Porque la Vida Eterna
Comienza, cuando muere, para el Hombre. 34
Si no hay Vida, Señor, tras de la Muerte,
Sólo lo que nos pase en esta Vida
Nos dará de ella su medida exacta.
Mas la Vida del Hombre,
Su plenitud alcanza en La Otra Vida,
Donde las cosas su valor invierten,
Para cobrar, definitivamente,
La eterna dimensión de su medida.
Señor, Señor, por eso,
¡Enséñame a medir, según Tú midas! 35
La Muerte se acerca
Y el Alma se exalta
Y el Cuerpo se aquieta.
Dios, que estaba lejos,
Está ya muy cerca.
Y en Dios renacemos
A una Nueva Vida,
Muriendo a la Vieja. 36
De Tiempo estamos hechos
Y no podemos detenerle al Tiempo,
Que nos va, según pasa, deshaciendo,
Hasta hacer de nosotros
Los Muertos que seremos.
Mas cuando hayamos muerto,
Ya no correrá el Tiempo
Porque fuera del Tiempo quedaremos.
Nos haremos Eternos.
Nos haremos Misterio.
Y un poco más ya como Dios seremos. 37
Si no hay Meta
No hay Camino.
No hay más que polvo en las suelas
De un Caminante perdido.
Vivir es andar.y andar
Camino de ningún sitio.
Mas si estás en todas partes,
Allí también estarás,
Pues ni al Tiempo ni al Espacio,
Sujeto, Dios Mío, estás.
Sé Tú mi Meta, Dios Mío,
Que quiero hasta Ti llegar
Pero no me sé el Camino
Y me puedo extraviar. 38
Alma mía incandescente,
Hasta que de Amor te mueras,
¡Siente! ¡Siente!
¡Sueña! ¡Sueña!
Porque no hay Muerte mejor
Que la del que por Amor,
Muere. Va al Cielo. ¡Y ve a Dios! 39
No temas a la Muerte,
Que con la Muerte no muere la Vida,
Tan sólo se hace Eterna
Y le hace Inmortal al que se muere. 40
Los Elegidos
Se nos mueren de Jóvenes:
Dios los lleva Consigo.
Los Elegidos:
Cuando llegan a Viejos
Claman contra el Destino.
Bien quisiera, Dios Mío,
Ser uno de Ellos.
¿Vivir.vivir cien años
Esperando a la Muerte?
A tan dura Condena,
Señor, no me condenes! 41
Si me creaste para Ti, Señor,
¿Por qué esta Larga Espera
Entre Tu y yo?
¿Por qué, por qué Contigo,
Ya no me llevas?
Tengo por un Castigo
Que aquí me tengas.
Porque en Tu Ausencia,
Los Días se hacen Años.
Los Años, Siglos. 42
No importa lo que fuimos,
Sino lo que seremos.
Cada día que empieza,
Empezamos de nuevo.
Dios no está en el Pasado.
Dios no está en el Presente.
Dios está en el Futuro
Que empieza cada día
Y que nos lleva a El, directamente. 43
Cuando te hayas muerto,
¡Qué Gloria tan Alta
Te espera en Los Cielos!
Al hacerte Eterno,
Todo habrás vencido
Al vencerle al Tiempo. 44
Sólo habladme de Dios cuando me muera.
Decidme que me quiere.,
Decidme que me espera.,
Y así me moriré, sin otra pena,
Que la que daros con mi muerte pueda. 45
Alma Mía, sueña., sueña.
Sueña que está Dios viniendo.
Que está viniendo.y ya llega.
Sueña que ya le estás viendo.,
Sueña que ya estás viviendo
Más Allá de las Estrellas
Que son la Puerta del Cielo. 46
Si venimos a irnos
Y llegamos, muriendo,
La Muerte es el Camino
Que a Dios está llevándonos,
Ya desde que nacimos. 47
Soy Hombre y ya he nacido
A muerte condenado.
Mas no será mi muerte mi Castigo.
Será mi mayor Premio, si me salvo. 48
Jesús Mío, sin Ti,
Esta vida que vivo
Vida no es.
Es sólo transcurrir.y transcurrir,
Hasta dejar de ser.
Y yo quiero, Dios Mío, seguir siendo:
Irme Contigo, para no morir. 49
Auque tardes cien años en morirte,
Muriéndote ya estás
Desde el momento mismo en que naciste
Y el primer paso diste
Hacia La Eternidad,
En la que Dios ya se te hará Visible
Y un Bienaventurado de ti hará. 50
Si Dios es Nuestro Padre
Y está en Los Cielos
La Tierra es un Destierro
En la que Dios nos hace
A todos Huérfanos.
Y Huérfanos seremos
Hasta que nos muramos
Y salga a nuestro Encuentro. 51
La Muerte es el Misterio
Donde la Luz se esconde.
Donde brotan las sombras.
Donde, aunque no le vemos,
Dios a mirar se asoma.
Y cuando Dios nos mira
Temblar nos hace a todos:
A unos temblar de Miedo.
A otros temblar de Gozo.
Dios, que estaba muy lejos,
Ya está muy próximo.
Con Su Llegada,
Todo en El se hará Todo.
Para nosotros.
Nada, La Nada. 52
Señor, cuando me muera,
Contigo iré.
Y tantas cosas que me fui sin verlas,
Viéndote a Ti, a todas las veré.
Todo es de Ti un Espejo
Y en él me miraré.
Pondrás ante mis ojos
Al Universo.
Y al verle, te veré.
Que la Grandeza de la Creación
Tu Grandeza, Señor, le está probando
A nuestra Pequeñez. 53
Señor, te estoy llamando.
Te estoy llamando. Ven.
Dejar quiero en el Mundo cuanto tengo
Porque te quiero sólo a Ti tener. 54
Hacia Dios caminamos
Y, en muriendo, a El llegamos.
Morirse es, por lo tanto,
Lo mejor que en la Vida
Podrá pasarnos. 55
La Muerte a Dios nos trae
Cuando nos lleva.
Si la Muerte no viene,
Dios no nos llega. 56
Si con la Muerte empieza
La Vida Eterna y el Eterno Amor.
Si la Muerte nos lleva
Al Encuentro con Dios,
Muerte a la Muerte nunca le llamemos.
Busquémosle otro Nombre
Que a Gloria suene
En los oídos de todos los Hombres. 57
La Muerte es sólo la Puerta
Para entrar en la Otra Vida.
Que Esta Vida tiene Entrada,
Pero no tiene Salida.
Empieza, pero no acaba
Cuando se acaba la Vida. 58
La Fe nos dice:
Dios nos devolverá
Lo que nos quite.
Después de muertos,
La Vida sigue.
Tras de la Muerte,
El Orden perturbado
Se restablece
Para ya nunca más ser conculcado. 59
Si Dios nos ama
No nos pudo crear para la Nada.
Sólo, sólo los Necios
Pueden imaginarse
A un Dios de Muertos. 60
Hacia Los Cielos, Mi Alma.
Ya está ascendiendo.
Ya mi Alma se perfuma.
Ya huele a muerto.
Que Alma que a muerto huela
A Dios está ya oliendo. 61
Sigue viviendo en mí,
Jesús, cuando me muera.
Yo no quiero tenerte y que seas mío:
Sólo quiero ser Tuyo y que me tengas.
Yo quiero ser Eterno eternamente.
Yo quiero ser eternamente Tuyo.
No quiero por más tiempo
Ser mío y de este Mundo. 62
¿Va a perderse nuestra Vida
En la Nada de la Muerte?
Si no es nuestra, nuestra Vida,
El Hombre suyo, ¿qué tiene?
Antes de nacer, ¿qué fuimos?
Cuando te mueres, ¿qué eres?
De un Misterio a otro Misterio
Vamos Ciegos., fatalmente:
Alma.Dios.Eternidad.
¡Pero la Duda nos muerde!
Y si nuestra Fe no vuelve,
Mordiéndonos seguirá. 63
Dulce Sueño sin sueños, acógeme en tu nada
Y en tu insensible gozo de muerte artificial
Líbrame de esta Angustia que el Alma me desgarra
Y aquieta tantas Dudas como turban mi Paz.
Dulce Sueño sin sueños, que das muerte y no matas.
Tu Paz acogedora no es la muerte real.
Lo que la Muerte sea, los Muertos se lo callan
Y nada más nos dicen: ¡Tú también morirás! 64
Porque he sentido en mis carnes
El desgarrón de lo eterno,
Dadme lirios y cipreses
En vez de rosas y almendros.
Que Eterno no es un Jardín.
¡Eterno es un Cementerio! 65
Cuando el Hombre se muere.
Deja de ser Persona.
Se hace un Cadáver,
Que a la tierra estercola
Y le da nueva vida.
Porque en Vida la Muerte se trasforma
Cuando la Muerte se trasforma en Vida.
Indefinidamente,
Se siguen una a otra.
La Muerte se hace Vida.
Vida la Muerte.
Que en la una y la otra
Siempre está Dios presente. 66
¡Muerte, cómo me confortas!
Cuando se lleva una carga
La jornada se hace larga.,
La Vida te sabe amarga.
¡Sólo descansar importa!
Vida, seme lo más corta.
Dale ya paso a La Otra.
Ya soy solamente un Alma
A la que el Cuerpo le sobra. 67
Felicitarte quiero:
Ganaste la Carrera
Por ver cual de los dos
Llegaba antes al Cielo
Y antes veía a Dios.
Llegaste tú el primero.
Dios fue conmigo Bueno.
¡Contigo fue Mejor! 68
Jesús Mío y Dios Mío:
Hacia Ti, día a día,
Paso a paso, camino.
Llegaré, cuando muera.
Andaré, mientras vivo.
Y es tanta mi impaciencia,
Que a este paso me muero
Antes de haberme ido. 69
Cuando me muera no os preocupe donde
Debierais enterrarme.
Cualquier trozo de tierra que no valga
Para enterrarle a un Muerto sí que vale.
Y cuando llegue el Día
De la Resurrección,
Dios volverá a juntar
Los átomos dispersos
De la que fue mi Carne.
Y de mi Cuerpo Muerto,
Otro Glorioso hará.
Y volveré al principio,
Desde el Final. 70
Cuando me muera,
No deis tierra a mi Cuerpo: incineradle
Para que al Polvo vuelva
Y vuelva cuánto antes.
Luego, arrojad al viento mis Cenizas
Para que se confundan con el Aire.
Con ese Aire, luminoso y claro,
Y que está en todas partes,
Pero al que no ve nadie,
Como si pretendiera,
Como Dios, ocultarse.
Mas, si más os consuela,
Enterrad mis Cenizas
Junto a las de mi Madre.
Si junto a Ella comenzó mi Vida,
Nada más justo que junto a Ella acabe.
Enterradme también, si más os place,
Junto a Antonieta, Amada Esposa Mía,
Si Ella muriera antes.
Si vivimos unidos de por vida,
Justo es que en la muerte, le acompañe.
Juntos los dos.
Juntos con nuestras Madres.
Y a la sombra de Dios.
Padre de Jesucristo y Nuestro Padre.
Pero no me lloréis.
Me he ido. No me he muerto.
En El Cielo estaré.
En El Cielo os espero. 71
Preguntas y más Preguntas
Nos hacemos
Cuando vemos que la Muerte
Se nos acerca en silencio.
Mas para tantas Preguntas
Respuesta alguna tenemos.
Y no la tendremos nunca.
Dios, que es la sola Respuesta,
Asimismo es la Gran Duda.
Y es la Gran Prueba a probar
Para de tan Grande Angustia
Poderle al Hombre librar. 72
Miro y miro.
Miro y miro y nada veo.
¿Es que no hay nada que ver
O es que me he quedado Ciego?
Te juro que no lo sé.
Mas por saberlo me muero.
Grito y grito. Grito y grito.
¿Y a quién gritando estaré?
¿Me oirá Dios desde Los Cielos?
Te juro que no lo sé,
Pero daría mi Vida
Por saberlo
Y dar sentido a una Vida
Cuyo sentido no encuentro.
Y que nunca encontraré
Si antes no empiezo a entender
Tantas cosas que no entiendo,
Cuando me enfrento a la Muerte
Y sólo tiemblo de miedo. 73
Si Más Allá de la Muerte
Ya no hay Nada.
Tenerle Miedo a la Muerte
Es tener Miedo a la Nada.
Si un Sueño Eterno es la Muerte,
Del que uno nunca despierta,
¿Voy a temerle a la Muerte,
Si el que sueña, sólo sueña
Que lo que sueña ya tiene?
Calla ya. No digas nada.
Te entiendo a la perfección:
Cuando se elimina a Dios
No existe nada mejor
Que refugiarse en La Nada.
Hazlo tú. No lo haré yo. 74
Mortal desasosiego
Mi Corazón tortura
Con negros pensamientos.
Pero, ¿por qué., por qué
Corazón ese Miedo,
Si no sabes a qué
Le tienes miedo?
Si es Dios Quién te creó,
Tu Padre es.
Y un Padre es todo Amor:
¡Alégrate!
Todo te dio cuando te dio la Vida.
Y lo que Dios te da,
Nadie te quita.
Seguirá siendo tuyo
Hasta la Eternidad.
¡Arriba, Corazón,
Que Dios está Contigo
Y siempre lo va a estar! 75
Cúmplanse en mí Tus Palabras,
Dulce Jesús de mi Vida:
Quede mi Cuerpo sin Vida
Sepultado en esta Tierra
Y suba al Cielo mi Alma
A gozar la Vida Eterna
Que me tienes prometida. 76
Cuando miro a la Muerte
Y miro a mis Pecados,
La Tempestad estalla
Bajo mi Cráneo.
No es para menos:
Cuando juntos los miro
Veo al Infierno. 77
Si miramos hacia atrás,
¡Qué deprisa pasó el Tiempo!
¿Pasará igual de deprisa
El que aún queda por pasar?
Como vamos para Viejos,
Aún pasará más deprisa,
Pues ya quedó atrás la Vida
Y pronto estaremos muertos.
Ya sólo somos Pasado.
Ya no contamos el Tiempo.
Ya no podremos hacer
Lo que por hacer dejamos.
Si Dios es, en El seremos,
O dejaremos de ser
Y a La Nada volveremos.
¿Valdrá la pena haber sido,
Si hemos de dejar de ser?
¿Para eso hemos nacido? 78
A lo largo de mi Vida,
Este mi Tormento ha sido:
Querer ser en todo Eterno.
Saber que en mí es todo Efímero:
Algo que se lleva el Viento,
Camino de ningún sitio
Para a La Nada volverlo. 79
No hay Verdad más segura que la Muerte
Que ya, desde que vienes a este Mundo,
Contigo viene.
Mas no te pongas triste.
Ponte contento:
Viene para llevarte
Con Dios al Cielo. 80
Si he de acabar en una Residencia,
Morirme quiero.
La mejor Residencia
No está en La Tierra:
Está en Los Cielos. 81
¡Qué larga es la Vida!
¡Qué tarde que llega
La Muerte querida!
Quiero a la Otra Vida.
No le quiero a Esta,
Que nunca termina,
Que día tras día
Se alarga y prolonga
Y acaba acabando
Con mis impaciencias
Por irme a La Otra,
Gloriosa y Eterna.
Datos del Poema
  • Código: 347988
  • Fecha: 16 de Abril de 2011
  • Categoría: Angustia
  • Media: 6.84
  • Votos: 82
  • Envios: 0
  • Lecturas: 1,510
  • Valoración:
Datos del Autor
Nombre: luis de la morena
País: EspañaSexo: Masculino
Fecha de alta: 23 de Septiembre de 2010
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1 comentarios. Página 1 de 1
cmph
invitado-cmph 06 de Junio de 2003

Nunca había leeido algo que me calara tan hondo el alma,escribes muy bello,además me identifico mucho con tu poema SIGE ASI!!!!!!!!!!!!!!!!!!

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