Hoy te digo adiós
y tal vez no lo siento,
porque me despido
y en mi hay un lamento;
nunca sabré si alguna vez me quiciste,
nunca tu sabrás cuanto yo te quice.
Hoy me despido de ti
y de tu cariño,
y aun no se si pueda
por que lloro como un niño;
aquello que sembre
para quererte a ti,
hoy deja un vacío oculto
muy dentro de mi.
Y tratare de mirar tus ojos friamente,
intentare decir tu nombre con voz indiferente;
tratare de estar a tu lado casi siempre,
intentare verte con otro sin que puedas verme;
evitare cruzar tus manos con las mías,
y mordere mis besos tristes cada noche y día;
conservare en mi tu bella sonrisa,
pero pienso en tu mirada casi muy deprisa.
Me dice el corazón
que no te olvidaré,
y tal vez empiezo a amarte como jamás te amé...
te dejo en esta ocasión la voz de mi corazón,
y cuando tu puedas sentir el fruto de esta inspiración,
no comprenderás y te preguntarás,
que mujer despierta en mi toda esa pasión,
no comprenderás y te arrepentirás
cada minuto que pase hasta la eternidad.
Por que esa mujer de quien hablo tanto,
es aquella a quien le debo este llanto,
que me da pasión... que me da quitud,
aquella dulce ilusión, ella... eres tu