Su cabellera, ella tiene nevada
y sus ojos, han tomado ocaso.
Su gallarda juventud, paso a paso
fue absorbida, por la vejez llegada
Hoy su mocedad, es clausurada
fuerza pierde, su cansado brazo.
Ella camina, con indeciso paso
y su faz, por arrugas es surcada.
Solo en ella, la ternura sigue
por ende, su afecto maternal
el cual, primaveral prosigue
Adornando, con maternal esmero
la existencia de sus hijos, y al igual
el recuerdo, de su amor primero.
Su cabellera, ella tiene nevada
y sus ojos, han tomado ocaso.
Su gallarda juventud, paso a paso
fue absorbida, por la vejez llegada
Hoy su mocedad, es clausurada
fuerza pierde, su cansado brazo.
Ella camina, con indeciso paso
y su faz, por arrugas es surcada.
Solo en ella, la ternura sigue
por ende, su afecto maternal
el cual, primaveral prosigue
Adornando, con maternal esmero
la existencia de sus hijos, y al igual
el recuerdo, de su amor primero.
Hoy somos edades clausurada sólo en ella la ternura sigue felicidades por una hermosa poesía plasmada con excelentes versos en un hermoso soneto Que tengas un hermoso día Felicidades por una gran inspiración