En tu cuerpo amanecía.

Noche, variante auténtica y reflexiva...
el codo de la acera, vierte luces fugaces,
cuarto de milla al llegar a la esquina
refugio solaz, de mis seres capaces...
un costal de perfumes, frescos, atentos
marcas en la piel, rezagos de peletería..
la calle desierta, los muros despíertos,
el beso robado, así, como lo querías.
Noche, prisma de griales aturdidos...
la copa de whisky en los labios gastados,
Sabina eterniza sus gustos por el olvido
mi amor esta intacto..perdona pasados...
Calma, cigarrillo de efluvios pernoctados
aromas de incienso, tu rostro y lozanía..
quien pudiera seducir esos costados
que arrancas cada vez cuando tocas mis porfías...
Y de ser tu noche, álamo, plática y diamante,
un vasto idioma de miradas tan recientes...
casi al embeleso de morir en un instante
perdido en tu país, de olores y vertientes...
Jazmín púrpuro de caídas y precipicios
donde yace tu pasión de lluvias clandestinas..
amante de mis ojos y casi en principio
difamadora de rojas, pasiones que obnubilan,
porque es tu noche, mi eterna madrugada...
insomnios calientes de versos que aún desvarían
en cada círculo de mis labios y en la espada
que clavaste cuando ya, en tu cuerpo amanecía.
"..R.N..."